orden y progreso

por mas que lo intente, estoy resignándome a la idea de que tener el placard ordenado all the time es sólo para neuróticas 24 hour. Para una mujer (hombres tomen nota), nunca hay espacio que alcance para guardar ropa aunque siempre nos vamos a quejar por tener 2 trapos locos y nunca vamos a tener qué ponernos. Todo esto, obviamente, es mentira de acá a la china excepto lo del espacio suficiente. En cada comienzo de temporada, o sea verano e invierno, ordeno la ropa correspondiente y termino regalando cosas que no usé nunca o pocas veces porque me convencí que guardarlas "por las dudas" es sólo acumular. Entonces miro esa camisa a lunares y pienso: en qué momento se me ocurrió pensar que esta porquería me podía quedar bien?! ni con photoshop, ni con la mejor onda del mundo es posible que algo así suceda. Ya fue. Y ahi va la camisa que alguna vez me pareció que era el último grito de la moda y ahora se había transformado en último grito de horror de la moda. Nada es tan terrible, chicas, al principio parecería que sí, que si regalamos ese vestido que nos quedaba fantástico a los 21 y ahora no nos queda tan fantástico pero capaz que agrandándole un poco las costuras puede andar, se nos viene el mundo abajo. Resistan al autosabotaje del tipo, y qué tal si alguna vez lo necesito, o lo quiero volver a usar? aunque querramos, ese vestido, a esta altura de la vida, es de barbie, y nosotras de barbie no tenemos ni lo blanco del ojo.